Los que leo

miércoles, 25 de mayo de 2011

Transformandose en fundamentales

En la inmensidad que es el presente, no vivo en medio de un laberinto, no transito por lugares conocidos, no respondo a la realidad prescrita. Es en lo desconocido, en los detalles esenciales, en los parajes por conocer, en donde radica la fe de estar plenamente segura que el vuelo recién empieza, que las dependencias no son exclusivas. En medio de un caos renovador está la satisfacción de las capacidades re-aprendidas en donde la capacidad de asombro es el ancla lanzada al vació, la espiral ascendente avanza en medio de la bruma revelando el alma como prisma, lo que hace de las cosas simples poderes esenciales. 


Una sonrisa es el guiño del alma frente al tiempo que se paraliza en la continuidad expansiva.